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domingo, 24 de julio de 2011

Loma Quita Espuela, dínamo del turismo sostenible en RD





Edición especial: Año Internacional de los Bosques
“Bosques a la dominicana”



Esta reserva científica es el principal destino turístico que mantiene activa la economía de San Francisco de Macorís y la región Nordeste.

Por María Mercedes



San Francisco de Macorís.- Para todas las personas que desean sumar un emocionante e inolvidable viaje a su historia de vida, la Loma Quita Espuela es una excelente opción. Sus caminos son empinados, angostos, planos, rodeados de ríos con cinco especies de peces endémicos y del cacao orgánico que cosechan sus cercanos pobladores.
La aventura inicia una hora después de salir de Santo Domingo, tiempo aproximado en que se llega a este ecosistema; ubicado dentro de las provincias Duarte y María Trinidad Sánchez, cuya superficie es de unos 72.5 km², equivalentes a 7,250 hectáreas.
Su límite sur, recorre el camino El Cercado y la Bajada; en el Norte, pasa por el borde del río Boba; en el Este, por los arroyos Totumas y Palma; y en el Oeste, por el camino La Ceiba-El Jobito.
A su vez, este bosque -bautizado así porque supuestamente le quitaba las espuelas a los caballos-, se encuentra enclavado en un sistema montañoso compuesto por la Loma Quita Espuela, con una elevación máxima de 985 msnm; la Loma La Canela, con 540 msnm; así como por Loma Vieja, El Quemado y Firme Los Sabrosos.


Súbala con entusiasmo y comodidad...!
Para emprender el paseo por Quita Espuela, -además de hacerlo en buena compañía, con mucho ánimo, entusiasmo y sí estamos en forma mucho mejor-, lo correcto es vestir en jeans largo, camiseta, con los pies calzando tenis o botas. Muy importante, también es llevar agua, antojitos para comer, cámara, gorra, sombrero, gafas, repelente e inclusive, una capa impermeable.
Y es que en el recorrido –que puede ser bendecido por la lluvia o el sol -, los guías entrenados por la Fundación Loma Quita Espuela nos dicen que este ecosistema posee una gran diversidad biológica, que lo hace el refugio ideal de 58 especies de aves, nueve de anfibios y reptiles, todas en peligro de extinción.
Una buena noticia que comparten con alegría es que el zorzal migratorio (Catharus bicknelli), pequeñita ave de canto de la región sudeste de Canadá y del noreste de Estados Unidos – que tras haber viajado más de 2,000 kilómetros para huir del frío-; encuentra abrigo en el este de la Cordillera Septentrional, específicamente en las Lomas Quita Espuela y Guaconejo.
De igual manera, concientizan sobre la importancia de esta reserva científica, en la que por sus formaciones vegetales convergen dos tipos de bosques naturales. El primero y más húmedo está por encima de los 700 metros de altura, es decir, en la cima de la Loma Quita Espuela; y cuya vegetación es de bosque pluvial.
Éste, que es el pico más alto del Cibao Oriental generalmente está forrado de nubes. Debido a su elevada precipitación -el aire siempre está saturado de vapor de agua-, la zona tiene un microclima muy fresco. Por esta condición y, porque según estudios llueve entre 3,000 y 4,000 mm anualmente; algunos expertos aseveran que merece ser catalogado como bosque nublado. ¡Cuando la visite, no deje de observarlo!... Es fascinante ver los troncos de los árboles que no alcanzan más de 8 a 10 metros de altura cubiertos de musgo y helechos de la familia Hymenofilacae.
El segundo bosque pluvial de este pico y de la Loma La Canela está por debajo de los 700 metros. Ambos, constituyen uno de los reductos más extensos y mejor conservados de este tipo de formaciones vegetales que abarca República Dominicana y Haití.
Continuando nuestro camino hacia la cima de la colina encontramos orquídeas maxillaria coccinea, epidendrum, ramosum, pequeños arbustos como la rubiaceae hillia parasítica; y bromelias, que son indicadores de alta humedad de aire.


Gracias a esta abundante biodiversidad, le aseguramos que durante el trayecto sentirá una temperatura agradable. Aún más, si el viaje inicia antes de que el sol regale sus primeros rayos, ya que también podrá deleitarse con una espesa neblina que se posa en el Arto de la Cueva o paraje de Los Bracitos, que le hará sentir que está en un lugar de clima húmedo, y no tropical como el que predomina en el país.
Al momento de la escalada, la concentración y una correcta respiración juegan un papel fundamental. Lo bueno, es que entre subidas y subidas se vale hacer minis descansos que nos ayudan a retomar las fuerzas, enamorar la vista con este singular paisaje, nutrir nuestros pulmones del tan necesario aire puro; y por qué no, para frisar esta aventura haciéndonos fotografías en un letrero, cuya sabia frase dice que: “Lo bello de este mundo es gratis”, mensaje que me recuerda el que en su momento Jesús le dijo a sus apóstoles: “Lo que habéis recibido gratis, dadlo gratis”. Mateo 10,7-15.


Madre de las aguas
Los bosques son una óptima cubierta vegetal para las cuencas de captación que suministran agua potable. Es por eso, que la fertilidad de su tierra la ha convertido en la madre de 60 cuentas hidrográficas que abastecen de agua potable y de riego a varias ciudades de la región del Cibao Oriental, como San Francisco de Macorís, Tenares, Salcedo, Pimentel y Nagua.
Aproximadamente, 15 de estas fuentes hídricas nacen en la periferia de la loma, siendo algunas, los ríos: Jaya, Cuaba, Cuevas, Nagua, Los Bracitos, Quebrada Prieta, Los Morones, El Valle, El Novillo y La Totumas; y los arroyos: La Lagunita, El Arroyaso, Las Cañas, Los Guineos, Brazo Grande y Piedra Blanca.
Por cada una de estas riquezas, este santuario natural de la flora y la fauna dominicana que comparte amigablemente su territorio con especies de árboles centenarios y milenarios como “La Cola”; el fenecido ex presidente, Joaquín Balaguer lo declaró Reserva Científica; y mediante el decreto 92-82, encargó de su manejo a la Fundación que lleva su nombre y a la Dirección Nacional de Parques, actual Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MIMARENA).
FLQE: Su fiel protector


Como en la cercanía del bosque viven familias que encuentran su sustento en las bondades que la madre naturaleza proporciona; se hacía vital tener una entidad que cumpliera la misión de protegerla y que afiance el desarrollo integral de los recursos naturales de las lomas Quita Espuela y La Canela, incluyendo las 29 comunidades rurales, que integran la denominada zona de amortiguamiento.
Altagracia Camilo, directora Ejecutiva, sostiene que por tales razones desde 1990, la Fundación de la Reserva Científica Loma Quita Espuela (FLQE), enfoca su manejo en tres ejes programáticos: Protección con vigilancia directa, Ecoturismo y educación ambiental; y Cooperación e investigación científica.
De conformidad con estos objetivos, la institución estableció un fondo rotatorio para la realización de actividades y para la siembra que reduce el impacto desfavorable en el medio ambiente, tales como la producción de miel, cultivos orgánicos. A éstas se agrega la crianza de cerdos.
La población local y las empresas que conforman el Grupo BON se interesaron por un cultivo en particular: el cacao orgánico. Ésta es, no solo una estrategia alternativa e inofensiva para la agricultura de subsistencia de la comunidad, sino un producto utilizable en la elaboración de sus helados.
Con esta realidad a su favor, el martes 22 de marzo de este 2011, la FLQE dirigida por Jesús Moreno, presidente de Helados BON; cumplió su mayoría de edad universal, en un momento en que el impulso del turismo ecológico en el país registra a la Loma Quita Espuela como el principal destino que dinamiza de manera significativa la economía de San Francisco de Macorís y la región Nordeste.


Por amor a la naturaleza
Al conversar sobre este bosque, cuya conservación forma parte de la responsabilidad social de Helados BON; su relacionista, Ana Angélica Moreno nos cuenta: “Mi familia -que por amor emprendió este proyecto- no piensa que hubiese pasado si no creamos la Fundación. La loma hubiera estado devastada, porque los campesinos vivían de tumbar sus árboles”.
Con satisfacción, asegura que en ese proyecto turístico-ecológico ponen en práctica su lema: “El ser humano por la naturaleza”, porque los campesinos además de que producen para vivir se han convertido en guardabosques integrados a la logística organizacional de los tours, logrando con sus testimonios que los visitantes sientan amor por esta tierra y vivan una experiencia única, que siempre desean repetir.
Para potenciar aún más este destino natural, los productores locales y este grupo empresarial trabajan en un programa de transferencia tecnológica que les permite producir cacao orgánico y crear un sistema de certificación de calidad del cultivo. “Nuestra meta es que esos cultivos ingresen a mercados más especializados y tengan un margen de beneficio mayor para que la vida de las comunidades continúe mejorando; y al mismo tiempo, garantice a Helados BON el abastecimiento de materia prima de buena calidad”, precisa Moreno.
En reconocimiento a esta efectiva gestión turístico-ambiental, en marzo de 2008; National Geographic realizó el video ¿Chocolate para salvar los bosques?, el cual durante 4 minutos 49 segundos, destaca la importancia que tiene la Loma Quita Espuela para la conservación del ecosistema dominicano.
Por igual, el audiovisual hace énfasis en que esta reserva científica es fuente de ingreso para los agricultores de cacao orgánico -y guías de turistas-, a quienes por supuesto, con una grata sonrisa les expenden un rico almuerzo típico cocinado en leña; así como el chocolate y la miel de abeja, frutos tangibles de su ardua labor agrícola.
Ah!, pero esta aventura no termina así. Para hacerla aún más memorable, usted puede darse un chapuzón en una piscina natural; y luego escuchar un grupo de campesinos, quienes al ritmo de nuestro contagioso merengue interpretan canciones que nos demuestran su amor y su regocijo de vivir y cultivar este bendecido refugio natural de Quisqueya.
¡Visite Quita Espuela!
Para confirmar su vista a esta reserva con o sin guía incluido usted debe llamar a la FLQE, al teléfono 809 588-4156 o dirigirse a la oficina, ubicada en la calle Dr. Luis E. Carrón; Urbanización Almansa casi frente al Hotel Caoba, en San Francisco de Macorís. También, pueden visitar la página www.flqe.org.do

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